martes, 8 de diciembre de 2020

María es la ternura materna de Dios

 Novena a la Inmaculada Concepción de la Virgen – Primeros Cristianos

La importancia de la figura de nuestra Madre María en la historia de la salvación es inobjetable. No se trata simplemente de una figura devocional, que pudiera presentar un atractivo superficial por ser una mujer fiel, devota a Dios, cumplidora de la voluntad divina. Es algo que va más allá de eso. Toda la historia de la salvación está sondeada de alguna manera por el anuncio de aquella jovencita que en el futuro prestaría su seno para dar entrada al cielo. Y esta irrupción de la figura de María se da en los momentos más tempranos de los anuncios de la salvación futura. Es como si Dios mismo no pudiera contener su propia emoción cuando vislumbra en ese futuro glorioso la presencia de Aquella que iba a ser la "Bendita entre todas las mujeres". Las imágenes con las que se describe a esa niña futura son quizás de las más entrañables que podemos encontrar en las Sagradas Escrituras. Ella es el "Lucero del Alba", la "Estrella de la mañana"... y tantos otros apelativos que descubren en quien los pronuncia un corazón conquistado. Para quien ha sufrido el oprobio del pecado y espera en Dios su obra de salvación, María no puede ser un personaje indiferente. Lo llama a descubrir en su interior una causa más para fundamentar su esperanza en un Dios que en este detalle añadido de su amor le demuestra que su preferencia por el hombre es absoluta. Nada lo podrá borrar jamás.

María desde el mismo inicio es presentada como la aliada perfecta de la lucha de Dios contra el demonio, empeñado en arrebatar de las manos de amor de Dios al hombre. La primera mujer, Eva, se dejó conquistar por el mal. La soberbia y la envidia azuzadas por la obra demoníaca habían hecho su parte. Y en aquel momento de su triunfo se creyeron todopoderosos. El castigo por el atrevimiento de los hombres fue inmediato. Habiendo desobedecido el único mandato restrictivo que Dios había colocado, aun cuando había más bien demostrado su absoluta disposición de compensar con la infinita cantidad de beneficios que estaba dispuesto a conceder, el hombre fue expulsado del Edén. Su traición no solo fue un daño a la confianza que Dios había puesto en sus manos, sino el peor daño que se infligía a sí mismo: "Después de comer Adán del árbol, el Señor Dios lo llamó y le dijo: 'Dónde estás?' Él contestó: 'Oí tu ruido en el jardín, me dio miedo, porque estaba desnudo, y me escondí. El Señor Dios le replicó: '¿Quién te informó de que estabas desnudo?, ¿es que has comido del árbol del que te prohibí comer? Adán respondió: 'La mujer que me diste como compañera me ofreció del fruto y comí'. El Señor Dios dijo a la mujer: '¿Qué has hecho?' La mujer respondió: 'La serpiente me sedujo y comí'. El Señor Dios dijo a la serpiente: 'Por haber hecho eso, maldita tú entre todo el ganado y todas las fieras del campo; te arrastrarás sobre el vientre y comerás polvo toda tu vida; pongo hostilidad entre ti y la mujer, entre tu descendencia y su descendencia; esta te aplastará la cabeza cuando tú la hieras en el talón'. Adán llamó a su mujer Eva, por ser la madre de todos los que viven". Habiendo sido el pecado la destrucción que el mismo hombre se procuraba, Dios se antepone para que, aun cuando el hombre reciba su escarmiento, quede abierto el camino de la plenitud futura.

Y en ese camino de promesa, de idilio de Dios con el hombre, está presente nuestra Madre. Siendo un personaje teológico fundamental, sin llegar a ser el esencial, es el personaje que nos expresa la ternura del rostro materno de Dios. Con María lo que de rudo pudiera tener la figura de Dios queda totalmente cancelada. No puede ser rudo quien ha escogido como su Madre la dulzura más grande sobre la tierra. Por Ella somos bendecidos todos los hombres. Por ella podemos sentir las caricias de aquella gallina que quiere acoger a todos sus polluelos bajos sus alas. Por ella no podemos sino contemplar a la misma que acunó en su regazo a Jesús, en el que nos podemos colocar cada uno pues a cada uno nos acoge de la misma manera. No existe un solo segundo en nuestras vidas en el que no podamos sentir que Ella está cumpliendo la tarea que le encomendó su propio hijo desde la cruz. Elegida desde el principio, anunciada como puerta del cielo, encomendada por nuestro hermano mayor a cuidarnos, cumple y cumplirá siempre con su mayor amor la tarea: "No temas, María, porque has encontrado gracia ante Dios. Concebirás en tu vientre y darás a luz un hijo, y le pondrás por nombre Jesús. Será grande, se llamará Hijo del Altísimo, el Señor Dios le dará el trono de David, su padre; reinará sobre la casa de Jacob para siempre, y su reino no tendrá fin". Esa es la Madre que Dios ha escogido para nosotros. Y está siempre a la disposición. No nos deja solos, pues Ella ha asumido con gozo esa misión. Su corazón es de Madre. Y un corazón de Madre nunca dejará de amar. Aunque seamos infieles Ella nunca dejará de ser fiel, pues cumple la voluntad del Padre que nos ha puesto en sus manos para que nos cuide y nos proteja.

6 comentarios:

  1. ⭐ _Solemnidad de la Inmaculada Concepción de María_

    🔥 *No temas*

    🌞 Con Jesús por la mañana. “Entró el ángel a donde ella estaba y le dijo: Alégrate, llena de gracia, el Señor está contigo. Al oír estas palabras, ella se preocupó mucho y se preguntaba qué querría decir semejante saludo. El ángel le dijo: No temas, María, porque has encontrado gracia ante Dios. Vas a concebir y a dar a luz un hijo y le pondrás por nombre Jesús” (Lc 1,26-38). Inmaculada significa que no tiene mancha, la que nació sin la mancha del pecado original con la que nacemos todos los seres humanos. Dios, en previsión de que sería la madre de su hijo Jesús, el sin pecado por antonomasia, permitió una excepción a la regla, ella nacería sin la mancha del pecado original. Produce mucha admiración pensar que esa jovencita tuvo la libertad de poder decir que no al requerimiento de Dios, esa fracción de segundos la creación entera aguardó expectante la respuesta de esa jovencita. Ella no tuvo miedo, se fió de Dios y dijo que sí. María es quien más conoce el corazón de Cristo y quien nos mira con los ojos de su Hijo. Pidamos a la "sin-mancha" que nos ayude a fiarnos de Dios y que podamos decir que sí a sus proyectos amorosos en nuestra vida, dejando atrás los miedos que nos paralizan. “¿Tengo al Señor en el centro de mi corazón? Ya que, si queremos un mundo mejor, es necesario construir una casa de paz y no un patio de batalla” (Papa Francisco). María, acércanos a tu hijo.

    🚶‍♂️Con Jesús por la tarde. Regálate un tiempo para poner esta tarde tu corazón en sintonía con el de Jesús. El Papa Francisco nos dice que: “La oración nace en el secreto de nosotros mismos, en ese lugar interior que los autores espirituales llaman ‘corazón’. Lo que reza en nosotros… es el misterio más íntimo de nosotros mismos.” Haz silencio interior para encontrarte con el Señor, reza tu cuerpo, reza tu intelecto, tus emociones, todo tu ser reza pues “es todo el hombre el que reza, si su corazón reza. Permanece un rato en oración.

    🌙 Con Jesús por la noche. Cierra tu día. Repasa los encuentros de hoy desde el comienzo de la jornada. ¿Qué encuentros te han alegrado? ¿Con quiénes no has estado a gusto? ¿Crees que alguna persona necesita que le pidas perdón? Caminar con otros es un regalo de Dios. Agradece por las personas que hay en tu vida.

    Reza un Padrenuestro, Ave María y Gloria por las intenciones del Papa, por la paz, por la salud del pueblo venezolano y por el fin de la pandemia.

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  2. Es lo que publica el Padre Carlos Silva, en la Parroquia San Juan Eudes de "El Marqués", en Caracas. Considero ser un buen complemento a esta reflexión. Amén.

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  3. María nos invita a que nosotros seamos como ella, imitemos sus virtudes, estemos siempre dispuestos a decir *"SÍ"* a la Voluntad de Dios y a confiar en todo momento en Él y en sus Divinos planes.
    ¡Gracias Dios por dejarnos a María como Madre!
    ¡Gracias Madre por tus enseñanzas, cuidados, paciencia, por todo tu amor hacia nosotros!
    Madre Santísima no permitas que nos soltemos de tu mano, átanos a tu Inmaculado Corazón, y ayúdanos a recorrer contigo cada día el camino que nos conduce hacia tu hijo Jesús.

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  4. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

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  5. A través de Maria, Dios dejó de estar lejos, bajo del cielo, dejó de ser una imagen de Madera y llegó para quedarse como huésped peregrino, compañero de la humanidad. Maria haznos disponibles como tú, a la llegada de Dios!

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  6. A través de Maria, Dios dejó de estar lejos, bajo del cielo, dejó de ser una imagen de Madera y llegó para quedarse como huésped peregrino, compañero de la humanidad. Maria haznos disponibles como tú, a la llegada de Dios!

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